Poder identificar las etapas del cambio donde te encuentras puede ser un factor clave de éxito. Muchas veces NO contemplamos las dos primeras etapas y realmente todos las pasamos.
En este post te voy a hablar de cada una de ellas; si no tienes mucha idea de la etapa en la que te encuentras, posiblemente al leer cada una te vas a sentir identificada; sólo te voy a pedir sinceridad contigo misma; no hay nadie más y nadie te juzga en este momento; no hay ninguna etapa mala y todos hemos pasado por todas en diferentes situaciones de nuestra vida.
Etapa de negación
¿Te han hecho algunos comentarios sobre tu peso o alimentación? y eso te molesta e incómoda, porque tu no sientes que sea para tanto; pero en el fondo te molesta porque sabes que algo hay de cierto en lo que te dicen, solo que no nos gusta que nos digan.
Posiblemente también te moleste porque lo has intentado en otras ocasiones y no ha funcionado, así que decides tirar la toalla y hacer como que todo esta bien.
Mi experiencia
Recuerdo perfecto que cuando pesaba 156 kilos una amiga del trabajo valientemente y con lágrimas en los ojos me dijo que le daba miedo que me fuera a caer cuando me veía bajar la escalera con tanto trabajo, o que me fuera a dar un paro y que mi respiración siempre se escuchaba demasiado agitada; ella realmente estaba preocupada por mi, pero en su momento yo me indigné y estaba muy enojada, porque no quería ver el problema; tanto no quería ver el problema que evitaba los espejos de cuerpo completo y si me llegaba a tomar una foto sólo era de mi cara; como si lo demás no existiera.
Es común en las personas que vienen conmigo, porque alguien más les pagó las sesiones o uno de mis programas estén en esta etapa; realmente…
Nadie, por más que te quiera va a poder venir a solucionarte el problema si tú no asumes tu responsabilidad y pones de tu parte.
Si conoces a alguien que se encuentra en esta etapa, se paciente, puedes sutilmente ir sembrando la semillita del cambio sin presiones; aunque la persona se enoje y de alguna forma se rebele al cambio, porque no quiere ver que lo necesita, créeme que algún foco rojo se ha prendido para darse cuenta que algo debe cambiar.
Si tu eres la rebelde que se niega al cambio (y lo sabes jaja), también se paciente contigo, sin presiones, ya que, el verdadero cambio se va a dar cuando la incomodidad de cambiar sea menor que la de seguir en donde estás. Empieza a buscar información y documentarte; te invito a leer mi libro Mi Camino Saludable.
Etapa de contemplación
Diste un salto y estás consciente de que algo tiene que cambiar… lo estás considerando; como que si, pero como que no; te genera algo de ansiedad pensar lo que va a pasar, porque posiblemente tengas que aprender a cocinar, ir a mover las carnes y todas esas cosas para las que en este momento quizá no tienes tiempo (revisa mi post sobre “Como ser saludable con una vida ocupada”).
Podemos pasar toda nuestra vida en esta etapa, que bien podría llamarse el “hubiera”, porque si ya llevas mucho tiempo aquí seguramente te preguntas de forma constante ¿Qué hubiera pasado si…? La buena noticia es que nunca es tarde y lo mejor, es que lo peor que te puede pasar es que te quedes en donde estás; aunque si comienzas a trabajar en el cambio desde el fondo de tu corazón ten la seguridad de que algo va a cambiar y créeme que ¡te puedes sorprender!
También conozco a muchas personas que están en esta etapa, algunas incluso me siguen en el blog desde hace dos años y otras desde que inicié con mi cambio.
Ahora facebook nos pone más fácil identificar que tan estancada estás en esta etapa, ya que nos muestra las publicaciones que hicimos hace 1, 2, 3, 4 y hasta 5 años, así que si el tema de la alimentación, el peso o el ejercicio es algo constante año tras año, pues esta es tu etapa y la buena noticia es que ya puedes pasar a la que sigue, que ¡te estás tardando!
Te confieso que yo también pase años en esta etapa; fue hasta la crisis de los 25 cuando me di cuenta que no estaba donde quería y como quería.
Cuando comencé a planteármelo en serio y estuve en etapa de contemplación hasta los 26 inicié el trabajo por un cambio real, porque no quería llegar a los 30 así; digo, si en la crisis de los 25 años sentí feo; imagínate en la de los 30! Así que me puse las pilas y puedes ver mi festejo de felices 30’s.
Etapa de preparación
Aquí, es cuando comienza la motivación a tope y empiezas a armar toda la estrategia para hacer el cambio; esta etapa es más como de documentarte e informarte; decidir qué programa vas a hacer, qué ejercicios; cómo vas a organizar tus comidas y tu agenda para que le entren las actividades extras sin saltarte tus horas de sueño.
Quienes comienzan con alguno de mis programas tienen unos 3-4 días para irse preparando previo al inicio; por eso siempre abro grupos unos días antes para poder ir interactuando, resolviendo dudas, aquí la planeación es clave para que no te gane el tiempo.
En resumen…
Mientras mejor puedas organizarte vas a ir evitando los imprevistos, así que tomate el tiempo necesario.
En el próximo post platicaremos de las siguientes etapas, y te compartiré algunos tips para que puedas seguir avanzando. Puedes leerlo dando click ¡AQUÍ!
¿Comparte conmigo en que etapa te encuentras?
¿Estás lista para dar el siguiente paso?
Si te comenzaron a caer los veintes de la situación en la que estás y empiezas a sentir esa especie de emoción y nerviosismo de querer comenzar, pues hoy tengo para ti un precio especial en mi Detox y puedes comenzar ¡este lunes!
Yo empecé y baje
mucho, lo hice más por mi salud. Pero estoy estancada, se me dificulta mucho hacer las comidas.
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