Bypass para bajar de peso

La decisión de hacerte una cirugía

Si tienes más de 15 kilos de sobrepeso, seguro ha pasado por tu mente tomar una “solución definitiva”, como un bypass, manga o balón intragástrico para bajar de peso…

De ante mano te digo que no estás sola, yo también pensé exactamente lo mismo que tu y te voy a contar…

Antes de comenzar con mi proceso para bajar de peso, consideré seriamente hacerme la cirugía, de hecho pasé 6 meses investigando todas las opciones, sus pros y contras. Pasaba muchísimo tiempo en foros de personas que contaban su experiencia.

La realidad detrás del bypass

Me di cuenta que el precio que había que pagar era caro y no estoy hablando de dinero, ahí te va mi experiencia:

Al reducirse tu estómago con cualquier procedimiento, tienes que asegurarte de consumir los alimentos más altos en nutrientes, porque hay menos espacio, así que sólo cabe lo nutritivo, y si con un estómago normal no eliges lo nutritivo. ¿Qué te asegura que si elegirás nutrientes con un estómago más pequeño?

Al principio, la cirugía es como todas las dietas (solo que más caro): Bajas de peso rapidísimo, pero el cuerpo está hecho para sobrevivir y va a empezar a accionar mecanismos que frenen la perdida de peso, y para seguir bajando no te quedará más remedio que hacer de la dieta y el ejercicio un estilo de vida… lo que podrías comenzar a hacer desde el principio y ahorrarte los problemas nutrimentales después.

Al operar tu estómago se genera mala absorción y te vas a tener que inyectar algunos suplementos como hierro, mientras tu cabeza pelea con la idea de querer comer chocolate líquido en lugar de vegetales.

Una historia verídica que encuentras en mi ebook Mi Camino Saludable, es que yo había bajado 10 kilos en los primeros 3 meses, a una conocida la operaron y en un mes bajó los mismos 10 kilos que yo… y no te lo voy a negar, sentí que la vida era injusta conmigo, pero elegí ir un paso a la vez y me alegré por ella, pero me enfoqué a mi propio proceso. En un año ella ya había recuperado el peso perdido, decía que no le habían ajustado bien la manga que le habían realizado, pero la realidad es que su mente no cambio. Yo para ese entonces ya había bajado 45 kilos.

Más vale paso que dure y no trote que canse…

El cambio de chip mental, de todos modos lo vas a tener que hacer, y créeme que puedes invertir el dinero de esa cirugía en un tratamiento integral en lugar de arriesgarte a tener consecuencias.

Vas a tener que cruzar ese puente por tu propio pie, pero créeme que nada te va a dar más satisfacción, y sobre todo la certeza de hacer las cosas que de todos modos vas a terminar haciendo… aprender a comer saludable y hacer ejercicio.

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¿Estás lista para vivir tu propio proceso?

Ya has visto que puedes evitar llegar a este último recurso que es la cirugía de bypass si cambias tus hábitos de alimentación y ejercicio. Son soluciones tan simples, que además te podrán ahorrar el dinero de la cirugía y las molestias de la recuperación.

Si quieres vivir tu propio cambio, llena el cuestionario de sesión inicial y envíamelo a islas.jazmin@gmail.com, me va a encantar ayudarte a transformar tus hábitos de forma permanente. Descarga el cuestionario dando click ¡AQUÍ!

¿Cuánto tiempo vas a retrasar tu proceso? Menos del tiempo que llevas intentando mil dietas sin un resultado consistente créeme =)

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